A raíz de la publicación en los medios de la noticia, sótano 71 se hace eco del descubrimiento y quiere informar a todos aquellos que están atentos a las novedades de este blog. La revista de divulgación científica “Muy Inquietante” ( aprovechamos para enviarles un afectuoso saludo ) lleva a su portada en el número de este mes la noticia. Un grupo de reputados arqueólogos, historiadores y especialistas en sopas de letras y autodefinidos ( por lo de los jeroglíficos ) afrontaban el noviembre pasado desvelar todos los secretos de una de las pirámides menos conocidas de la zona: Hashuts-Parnal.
Pero quizás sea mejor que transcribamos parte del artículo de la revista y así le informaremos de primera mano. El párrafo corresponde a las declaraciones del Arqueólogo Profesor Argamaso Palanca II, uno de los responsables de que la expedición llegara a buen término:
“ [...] de esta manera, envolvimos en papel de periódico el resto de los bocadillos del desayuno y nos pusimos manos a la obra para intentar desentrañar los misterios de la pirámide. Intentamos penetrar en ella de todas las formas que nuestros estudios nos recomendaban: llamar a la puerta, pegar voces a ver si se asomaba alguien, entrar por la chimenea.... pero todo fue inutil. En eso, un integrante de la exploración, el insigne Doctor Asueto Dominical, apoyándose en una de las piedras, concretamente una en la que aparecían extraños grabados, hizo que toda la cara norte de la construcción cayera hacia delante, dejando al descubierto el fabuloso descubrimiento: la pirámide la formaban la base, las cuatro caras y una especie de andamiaje interior que sujetaba toda la construcción.
Tras nuestro entusiasmo inicial, puesto que era la primera vez que se hallaba una pirámide de estas características, exploramos su interior...bueno, lo poquito que había que explorar, pues ya le digo que solo tenía un piso, encontramos un papiro que arrojó luz al misterio.[...] En él, el arquitecto, diseñador y constructor de la pirámide había reflejado la contabilidad de la magna obra, y hemos descubierto que desvió fondos de este encargo, hecho por el faraón Ah-Que-Metiman, para terminar de construir el complejo turístico que poseía el arquitecto en las costas de Egipto ( llegando al Nilo, a mano izquierda concretamente ). Dice la leyenda que el faraón todavía busca al timador en la otra vida. ”
Muy inquietante. Número 2150 del año 2005 después de Cristo. Página 93.
Esto es básicamente lo que van a encontrar en el artículo, junto a algunas fotos... y la verdad, ahora que esta redacción se percata, le hemos hecho la puñeta con la exclusiva a la revista....bueno, parece ser que ya hay otro sitio que no nos va a recibir de manera muy efusiva.
Informó Andrew Plktr ( el único periodista sin vocales en el apellido)
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