jueves, 22 de enero de 2009

SÓTANO 71 EXPRESS.


VUELCO IMPREVISTO EN EL SICCOSSER 234.

Noticia económica del portal Damemidinero.com.

El índice Sicosser 234 anda revuelto desde el último repunte del Brandewthing 34. En opinión del segundo ViceManager del PCIX: “Esta anormalidad en el Trocadero es indistinta a la verticalidad horizontal de los niveles actuales y venideros”. El GDÚ afirma que los malos datos arrojados por el Prussian School of Economists harán deflacionar el prudencial desnivel diferencial del pasado trimestre.

Sin embargo para Christian Purepower, vocal del Chachi Institute of Monetary Decision esto no es más que un claro reflejo del mal manejo de los índices Q3 tras la decisión de rebajar los tipos de interés duflerencial al tres y un cuarto, en vez de tras transponderarlos equidistancialmente a las redirecciones de interés nacional, todo ello dependiente de la subida del precio del coco rallado.

Mientras tanto el VI/BTGTS propone escandenciar las diferencias pluriempresariales presentes en el chinguenato perterárico firmado con anterioridad a la deflagración polivalente del concordato interministerial, todo ello en acuerdo con la intermesa seccional constituida para tal defecto por los vicealmirantes del Pacífico Norte, los Correveidiles Intergrupales y una señora con un matasuegras.

sábado, 17 de enero de 2009

IDEAS PRESTADAS.


A TRABAJAR LES HAN DICHO.

Andan ustedes revueltos, me cuentan los allegados. Al no tener fricción con el pueblo llano de meseta, no podría asegurar que estos rumores fuesen ciertos. Pero soy columnista, y si no opino de vez en cuando me brota espuma de las orejas. Espuma, por cierto, no reutilizable para otros fines. Y no hay cosa que más me enerve de los mismos nervios que perder el tiempo segregando jugos inútiles. Pero vayamos al tema. Los dignos responsables, altos mandatarios y demás correveydiles regentes de nuestros destinos se reúnen un rato, en concordancia con sus merecidos estipendios, y acuerdan en bien de la maltrecha economía, someter a votación aumentar el chorro de horas laborales. Y se les pregunta a ustedes y fruncen el ceño. ¡Pueblo mío, no te reconozco! ( adoro declamar al estilo clásico ).

Antes de antes se les sugería la idea al personal operario patrio de transcurrir alguna hora de más en el entorno laboral y estos, por única respuesta, depositaban la vista en el suelo, la gorra en el pecho y contestaban “sí patrón, ¿cuántas horas patrón?”. Y no acudían los sindicatos, los amigos de la vagancia y los aspirantes a trabajar sin cobrar. El progreso sólo acuna malos inventos. Nada de lo nuevo es bueno. Es más, yo reniego de inventos posteriores al bidet, ya puede usted imaginarse.

Pero dejemos de hablar de mí y continuemos hablando de mis ideas. Se han quejando con amargura ante la sombra del estiramiento de jornada laboral. “No vamos a tener tiempo para los hijos” dicen, “nos van a pagar igual, esto es retroceder”... ¡cuchufletas, pueblo anónimo y malacostumbrado! La tele lleva criando a sus hijos desde que se inventó el color, ustedes suelen gastárselo todo en rebajas del tres por dos en hipermercado y por supuesto que se debe retroceder. ¡Nunca debimos salir del régimen feudal! ¿Conocen ustedes a algún labriego del medievo quejumbroso por su régimen laboral? Pues ahí tienen la clave.

Más allá está el tema que algunos listos con gafas han planteado, “¿más horas produciendo qué, si no se vende?”. No me gusta su tono, jovenzuelo imberbe. Si sobra tiempo, se repinta la factoría, se liman las pezuñas a los burros o se barre la mansión del empresario. Vamos, ¿a dónde vamos a llegar si seguimos tildando de descabelladas las órdenes del empresario? ¿Le ha picado el mosquito del comunismo, hippie? Vamos, es pronunciarlo y subirme unos picores de ideología de rascarme contra las jambas de las puertas.

Y usted dirá seguro de su epiglotis “¿cómo opina usted del trabajo si pega los sellos con la lengua del mayordomo?”. Y le contesto desde el respeto a su posición como el escalón inferior de la pirámide laboral: pues bien que le gustaría a usted que el gobierno me arrebatara mis castillos y mis haciendas para entregárselos a personal que nada tiene. ¡Están acostumbrados, tanto campo no puede hacerles bien! Permítame un consejo o apague el monitor unos segundos: el trabajo, de otros, dignifica. Reparte riquezas a quienes la producen. El pueblo debe acostumbrarse a tirar con menos, un mordisco de rábano, una sopa de piedras y a trabajar con el estómago muy ligerito. Y nada de ocio. El ocio nada más trae dispersión, malos hábitos, lujuria y desenfreno y aspiraciones a ser de la clase alta. Más trabajo hace falta aquí, hombre, y no tanto profano con aires de Conde. Vamos a dejar las cosas como están, que a mí me complacen.

Salvador de Pestaña.

lunes, 12 de enero de 2009

LA VENGANZA ES UN PLATO QUE SE SIRVE RECALENTADO.

INDUSTRIA ALIMENTICIA ALIADA CON LOS INSTINTOS PRIMARIOS.

“La venganza no es buena, mata el alma y la envenena”. Estas sabias palabras eran pronunciadas por el insigne académico Louis de Chippenydalequedale. Ahora que miro hacia atrás con cuidado de no producirme un esguince, también podría ser que la oyera en aquella mítica serie “El chavo del ocho”. No me hagan mucho caso, estas fiestas me han obstruido las entendederas, me temo. La multinacional de la alimentación Prudencia, conocida localmente por sus croquetas rellenas de caspa, da un paso más al abismo contable comercializando un producto que, en palabras de su responsables, “confiamos en su viabilidad en el mercado. Más que nada, porque si no se vende nos lo vamos a comer con patatas, ¿y usted sabe a qué precio anda el maldito tubérculo?”.

Pasando al producto en cuestión, pues esto no es más que un espacio publicitario encubierto, como los míticos minutos musicales de nuestra querida chorravisión, “Venganza Precocinada Prudencia” se prepara en escasos minutos con un golpe de calor de microhondas. Incluso acercándole una cerilla a la caja, usted verá por arte de birlibirloque como un aguerrido tipo de mandíbula poligonal, ojos esquivos y nulas dotes interpretativas aparece en su cocina, o en su baño si usted ha instalado en tal ubicación su aparato microhondas: es su casa y la decora como le sale de los bigotes, diga usted que sí. Descongelado y tras unos instantes de estrujarse la americana, este vengador precocinado le preguntará por los datos del interfecto al que usted le profesa tirria desde que se quedó con aquel cromo del jugador Pipirrana del Athlético de Cigüeñal cuando acudían a segundo curso de párvulos. Porque las afrentas de pequeñito son las que más se recuerdan. Luego uno se hace mayor, le crecen las orejas y no puede pelearse usted con su superior a la hora del café detrás de las porterías.

Sugerencia de presentación.

Una vez consumada la venganza un aditivo artificial hará desvanecerse a su ajustacuentas particular, haciendo que usted desembolse una cantidad extra por cada venganza en cadena ¡qué listos son los señores de Prudencia!. “Según vayan las cosas, tenemos previsto comercializar cajas familiares con cuatro integrantes de un comando injustamente acusado de un delito que no había cometido y fugado de la prisión a la que había sido confinado. Si no, pues descongelaremos a veinte justicieros y formaremos un equipo de júrgol, que aquí es lo que pita”, se despacha a comodidad el señor Terrones, presidente vitalicio de Alimentación y Fundas de Amianto Prudencia.

Varias asociaciones de ociosos sin ánimo de lucro ( para su desgracia, añaden ) han protestado a las puertas de la multinacional del timo filatélico Forúnculo Pirratélico a raíz de la comercialización del producto. Su portavoz, Matías Sosías explica las razones “la factoría de Congelados Prudencia está lejísimos. Aquí protestamos en pleno centro y total, para lo que va a servir”. En su última actuación en público, el señor Terrones responde a las protestas con toda la calma y sabiduría acumulada en cincuenta años de cargo: “¡que me dejen ustedes vivir, caramba, si protestan tanto algo habrán hecho en el pasado. Que cada vela aguante sus palos!”. Empujado por su sobrino de confianza somos desalojados del despacho, con el consiguiente problema acústico por su parte para seguir oyendo nuestras preguntas. En lo sucesivo tengan ustedes cuidado con lo que descongelan. ¡Y aquel cromo de Pipirrana lo intercambiamos, ahora no me vengas con esas Manolito!.

Informó Álvaro Coque, redactor reserva criado en barrica de roble compostelano.

domingo, 4 de enero de 2009

CRISIS EN ECONOMÍAS INFINITAS. (2)

ESPECTACULAR NÚMERO 2.

Una vuelta que nadie ha solicitado. Un espectacular segundo número. Bancas colisionarán, entidades caerán. Nunca nada volverá a ser lo mismo. Ni la nocilla de avellana ni nada. Todo esto en otras publicaciones. Aquí un montaje chusco reutilizando las mismas viñetas del número uno. Reciclar es importante.

Y tenemos más cara que espalda.

Departamento gráfico de Sótano 71. Remando en galeras desde 1977.