lunes, 28 de diciembre de 2009

SÓTANO 71 EXPRESS


LA DICTADURA DE SAN PAQUITO PODRÍA SER UNA FARSA.

“Follow the yellow bricks road”, Connetticutt.


Durante décadas el general Luis Norberto Piñones ha gobernado, con mano dura y exceso de puntapiés a sus paisanos de la bella isla de San Paquito, tan solo por llevar más chapas de refresco sobre el bosillo de los bolis de la pechera. Ahora, en un informe sacado a la luz por unos espías chivatos del otro lado de la valla, se pone en entredicho esta dictadura comunisparroquial.

Según estos documentos de alto secreto y escritos con bolígrafo verde ( mal rayo les parta por ello ) la dictadura de San Paquito se inició como una broma, al decir el General Piñones a sus compinches “vamos a decir que somos los dueños de esto y que nos tienen que regalar cosas y los huertos son nuestros. ¡Verás que risa más grande!”. Al parecer el chascarrillo se les habría escapado de las manos y ahora no estarían en disposición de dejar de gobernar el país, tendrían que dar de alta otro dueño y al parecer eso es mucho papeleo para el calor reinante en la isla.

El General Piñones, masticando un tanque Potolov ruso de la misma rabia, declara sacándose los remaches de la muela del juicio “!Precoreligionarios, autócratas, cuñados gorrones!, queréis desestabilizar el gobierno democrático de San Paquito y para estropear las cosas ya me basto yo solo”. Los vecinos de la isla afirman, mientras tanto, que no recuerdan haber votado al General Piñones para mandamás, pero temen preguntar no vaya a ser que les tire una bala muy rápido.

Si hay novedades ustedes serán los primeros en enterarse. Nosotros llegaremos tarde al noticiario casi seguro.

3 comentarios:

loquemeahorro dijo...

Pues ayer hubiera sido un buen día "inocentes, inocentes, que todo era una broma", y el que se enfade (o quiera juzgarles o algo), es que no tiene sentido del humor y no sabe divertirse.

Rubén D. Caviedes dijo...

Qué fuerte me parece. Al Tribunal de la Haya mandaba yo a éste, de la que baja a la gasolinera a comprar doritos, vería que risa le iba a dar. ¿Y porqué los habitantes de la isla no hacen una revuelta pacífica, en plan revolución de los claveles, o mismamente una revuelta más tradicional a tortazo limpio, para derrocar al dictadorzuelo ése absurdo? ¿Es que acaso lo aclaman por toda la isla en cual si fuera el sacerdote de Rapa Nui o cual si hubiera ganado, mismamente, operación triunfo? ¿Es que estamos locos, o qué invento es éste?

Mr.Incógnito dijo...

Comentemos:

Lo que me ahorro: Es que el pueblo llano y los superjueces no tienen ni gota de sentido del humor. Ni gota de la otra en las piernas de abajo.

El señor de las moscas: Suponemos que este caso podría verse desde el prisma sociológico como un funcionamiento erróneo de las fuerzas sociales de base, que no ejercen su acción reivindicativa. Claro, que también puede ser que teman más al que pueda venir, ya se sabe, se le coge cariño al que te dicta toda la vida.