NOTARIO AL BORDE MISMO DE LA ASFIXIA.
Chismorreos sin fronteras.
Todo ocurre en la tarde del pasado miércoles en el despacho del reconocido por la vía pública notario Catalino Vozdementa. Durante la lectura de una expropiación rectangular de bienes apropiados en el pasado venidero pertenecientes a un ramillete de socios de cierta empresa que ha declinado hacer declaraciones, el citado profesional de lo suyo sufre unos momentos de ahogo de gañote al leer, de corrido y para llegar prontito a casa, la declaración de traspaso de bienes y regulares a los allí reunidos, un tocho hiriente a la vista conformado por trescientas mil páginas cosidas al bies y con escote “palabra de honor”, como es de recibo en un despacho designado para estas cosas de dar fe.
Atrancado en la palabra “estipendio”, con los ojos al vapor y escozor de orejas, en un primer momento los asistentes creyeron ver en el incidente una curiosa “performance” del citado notario, para hacer más leve y llevadera la lectura del citado mondongo legal. Aplaudido y jaleado en un primer momento, y ante la negativa de la victima a realizar un bis, los presentes se temen lo peor cuando lo ven abrazado al asiento y en tonos granates. Agarrando un teléfono por las solapas, llaman a los servicios sanitarios, a asistencia en carretera, al quinto de caballería y a un sobrino afincado en Murcia “para ver quién acudía primero”. Sobre el tema de que realizaran apuestas sobre este último término también han declinado hacer declaraciones.
El contrato de préstamo de adquisición de activos circulantes de la primera parte contratante tuvo que ser firmado, sellado y remendado a bordo de la ambulancia, teniendo como testigos a un camillero a falta de un par de asignaturas y una bombona de oxígeno perfumado. A la víctima se le ha recomendado reposo, aspiración branquial y que no se tome las cosas tan a pecho, que total, al salir de allí se iba a comer un buen atasco y no hace falta correr. También ha declinado hacer declaraciones, apuntándose a la moda de esperar un buen dinero por la exclusiva
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