martes, 10 de noviembre de 2009

SÓTANO 71 EXPRESS


ABUSONES CON TROMBONES ESPANTAN A PUEBLO.

Cedido por Titulares Musicales Al Peso S.A.

Una banda malencarada de motoristas armados con trombones de lengüeta revuelta ha conseguido espantar a toda una población entera, formada por el señor Nicasio, su santa esposa Robustiana, un perro bizco y un libro de sudokus a la marinera de la bonita localidad de Disgustos del Mar, en Sotanillas. Hererderos de los molestos moteros reflejada por la sabia televisión americana de los ochenta y noventa, recorren pueblos y ciudades espantando a todo aquel organismo con orejas con sus desacompasadas interpretaciones de la quinta de Chipén en Dolor mayor.

“Semos unos tipos malísimos, los Tromboneros del Infierno. Nos afeitamos un día sí y otro no, no reciclamos y lo peor de todo, nos encantan los karaokes” declaran esta peligrosa banda. Mediante comunicado de prensa en buzones comunitarios, las autoridades declaran “para esto vendría estupendo el Equipo A, pero como ustedes no quieren remakes, a fastidiarse tocan”.

Por su parte, el defensor del Pueblo afirma “en cuanto termine de coserme las mallas del traje de superhéroe me meto dos migas de pan en los oidos y les doy lo suyo”. Unos por otros los trombones sin barrer, y la maléfica banda amenaza con invadir los pueblos vecinos a ritmo de La Cucaracha de Brandemburgo, compuesta por August Von Peláez, que dejaría su puesto actual en el Burriking de su barrio si al final las amenazas se cumplen.

6 comentarios:

loquemeahorro dijo...

Con trombones? qué horror!!!
Todavía estábamos recuperándonos de la invasión de cánticos tiroleses, y ahora esto.
Es el apocalíssssiiiiiiiiis que diría cierto famoso contertulio.

Luc dijo...

El defensor del pueblo zurciendo las mallas! Ya los superhéroes no están tan considerados como cuando Superman, que iba de gastos pagados y se pulía los presupuestos locales en gomina y trajes de chaqueta serie streeper con velcro en las costuras. Adónde vamos a llegar...

Rubén D. Caviedes dijo...

Hace usted pero que muy bien haciéndose eco de la reivindicancia local; a mi pueblo una vez llegaron una caravana de moteros con caleidoscopios que no vea que incordio de gente, oiga: todo el día mirando por los caleidoscopios con un ojo guiñado y en su jeta dibujada genuina expresión de absorto pasmo. Que entiéndame, no molestaban por lo ruidoso, porque ruido no hacían: pero no vea que pintas. Parecían de Mad Max. Y cuando se lo dijimos al coleguilla majo del jefe de la banda -que es inequívocamente el que va en el sidecar-, nos replicó el tío que explicaciones al maestro armero, que ellos estaban allí para mirar por sus caleidoscopios y que ninguna fuerza humana les haría abandonar el lugar. Menos mal que justo al terminar la frase, cuando estaban chocando laspalmas y carcajeándose de puro duros que eran, apareció Jean-Claude Van Damme en mortal salto de quaq y sin camiseta -Jean Claude- de detrás de unos matojos y se puso a repartir hostias a mano abierta.

Mr.Incógnito dijo...

Respondiéndoles:

Ño que me ahorro: La música ligera no hace más que darnos disgustos en las últimas fechas.

Luc: Desde la liberalización del mercado de los superhéroes estos últimos están pasando unas penurias más allá de las propias del puesto.

El señor de las moscas: La observación mediante caleidoscopios ha arruinado la vida de muchos jóvenes prometedores, convertidos en piojosos moteros dependientes de alegres formas y colores. Les está bien empleado que el saltimbanqui belga les dé de tollinas en la cepa de la oreja.

Anónimo dijo...

Me sumo al espanto de la numerosa población , como organismo con dos orejas en estado de funcionamiento parcial, debido, sin duda, a otras invasiones anteriores, y me ofrezco voluntaria a coser mallas de superhéroes,para que las penurias sean menores, en fin..

Mr.Incógnito dijo...

¡Que loable su ofrecimiento para con la causa de la lucha contra el crimen! Si remienda usted capas, pone parches y coderas y cose insignias con usted el mundo esta un poco más a salvo.