martes, 17 de marzo de 2009

IDEAS PRESTADAS

CARAMBOLAS INDECENTES CON RED.

Si son ustedes personas de bien, decentes, practicantes o enfermeras, en definitiva, si es usted como debe ser usted porque se lo dice otro aunque a usted no le acabe de gustar, estará de acuerdo conmigo. Internet es un peligro. Y sí, es una paradoja que lo diga a través del mismo medio que critico, pero mis sirvientes ya se tienen el cuento aprendido y ardo en deseos de contar mis ideas a otros.

¿Porqué es un peligro? Preguntará usted apuntando a su ordenador con un trabuco del siete con doble cargador y cachas de madera. Por su contenido. En mi larga relación con este medio, imagine, llevo navegando por la red al menos dos tardes, he hallado algo que es, indiscutiblemente, una materia no apropiada para niños de corta edad y mayores que siguen pidiendo año tras año el catálogo de juguetes de los grandes almacenes El Porte Finlandés. Este tipo de personas no deben asistir, con la facilidad que otorga deletrear la materia en ese teclado, instrumento del diablo aún más peligroso que la ouija, a ciertos espectáculos bochornosos, vergonzantes, miserables y otra serie de calificativos de los que no haré uso por tenerlos encima del armario y no tener al mayordomo a mano.

Las estufas.

¿Cómo pueden las autoridades laxas de este país permitir la inclusión de anuncios de estufas al alcance de todos? Descritas con todo lujo de detalles, con fotos anteriores, posteriores, ¡en mitad de salones de residencias privadas!. Esto es un disloque, ¿esto es democracia? ¿a esta pantomima ha llegado el estado de derecho? Cualquiera desde su casa puede entrar en un buscador, y en soledad, refocilarse las pupilas con la imagen de estos instrumentos.

Por si esto fuera poco, vengo a denunciar el hecho de que las empresas suministradoras de este producto se anuncian libremente en la red, propiciando que cualquiera con una tarde libre y con metálico o tarjeta pueda acercarse al centro de su ciudad o a las alejadas calles de un polígono industrial para hacerse con los calientes servicios de este reprochable negocio. No tengo edad para asistir al bochornoso espectáculo de la caída de valores morales de la sociedad occidental, propiciada por nuestro presidente, un hombre que critico ahora, y seguiré criticando siempre, sea quien sea el que ocupe el cargo. Soy mayor y rico. Nadie compra mis opiniones. En realidad, yo podría comprar opiniones ajenas por si alguna vez me quedo sin tema para esta columna.

Huyan de las estufas. No permitan a sus hijos contemplarlas en la soledad de su habitación a través de la fría pantalla de su ordenador. Si la gente viera más señoritas y señoras en edad de merecer prácticamente desnudas ejecutando posturas provocativas con buena iluminación e incitando a la lascivia y a la lujuria, esta sociedad marcharía mejor. Ponga una fresca en su monitor y huya de las calientes estufas. Si es usted como yo digo que debe ser usted, lo hará aunque a mí, en último término, lo que usted haga me importe una gaita.

Salvador de Pestaña.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y las tostadoras? ¿Que me dice usted de las tostadoras? Un auténtico escándalo, señor mio.

Mr.Incógnito dijo...

Un dislate, no cabe duda. Las sandwicheras ni mentarlas.

Luigi dijo...

Pues mi última adquisición fue una máquina de donuts de la que estoy muy contento, en especial porque ya salen con los agujeros hechos, Un primor, oiga.

Mr.Incógnito dijo...

Sorprendente, ¿y puede aplicarse tal tecnología a cualquier alimento? se pueden sacar chuletones redondos con agujero?

Rubén D. Caviedes dijo...

Menos mal que le tenemos a usted en la retaguardia de la moral laica del país, Mr. Incógnito, y digo país por llamarlo de alguna manera; menos mal que aún quedan próceres temerosos de Dios, tal que usted, que alzan la voz ante estos atropellos.

Le advierto que se cuide de los poderosos lobbies pro-estufa que medran en el país cual setas; sus tentáculos llegan a todas partes. No se extrañe usted si después de esta proclama le cierran a usted el chiringuito; me consta que incluso las compañías proveedoras de dominios en internet están en el ajo. In the garlic, por si nos lee alguien de Cueca.

En cuanto a la otra discusión: no se dejen enmarañar en esas disquisiciones de si sandwichera si sandwichera no: son entelequias, subterfugios y gilipolladas orquestadas por el complot pro-estufil, cortinas de humo para ocultar la cruda realidad: todas ellas son poseedoras de una resistencia, que es la verdadera inmoralidad en todo esto, tener una resistenia y hacer impúdico exhibicionismo con la misma.

loquemeahorro dijo...

Una cosa es la libertad y otra el libertinaje.

Años llevo queriendo colocar la frasecita de marras y por fin puedo! gracias Mr. Incógnito, por darme esta oportunidad: has vuelto a hacer un bien a la humanidad.

Mr.Incógnito dijo...

Quede claro en primer lugar que no nos hacemos responsables de las opiniones vertidas por nuestro colaborador de guardia. Ahora bien, si a ustedes les parecen adecuadas, pues podemos obviar ese aspecto. Respondamos a las postales:

Rubén: El funcionamiento de los lobbies de todos es concido: presiones indiscriminadas a favor de los intereses propios, maletines misteriosos, gorilas albinas con taparrabos de leopardo...nos cuidaremos las espaldas, pierda cuidado.

Loquemeahorro: Fieles a nuestro esfuerzo de facilitar el intercalado de frases cuasi inútiles desde 1977.