SE ACABARON ESAS VISITAS A PARIENTES Y REUNIONES ETERNAS.
Usted, como humano moderno, en ocasiones sufre en silencio los compromisos sociales. Su pareja insiste en visitar a unos primos en cuarto grado que viven en un séptimo piso sin ascensor. Su jefe, diez minutos antes de salir de puente, insiste que le ayude con la presentación de esos jabones con pelo ante los inversores checoeslovacos.
¡Imagine!, imagine todos esos momentos en los que no le apetecía estar dónde estaba y no hacer lo que estaba haciendo. ¡Pero usted tiene la libertad en su cogote!
Industrias Anoillo, poseedora de la pantente de la libreta con rulo de alambre por ambos lados, innova de nuevo gracias a su plantilla de científicos con leves defectos estéticos a buen precio. Presenta ante ustedes SOCIAL EJECTOR, su eyector unipersonal portátil de usos múltiple y a precio de monda.
No debe preocuparse: es de fácil instalación. Un pequeño interruptor-pulsador de cromo vanadio-niquel inoxidable adherido a su nuca, pescuezo u cogote es todo lo que necesita para activarlo. Deberá calzarse posteriormente los calcetines especiales suministrados en su envotorio de SOCIAL EJECTOR. ¡Está usted listo para acudir a ese compromiso que le produce escalofríos!
Esta usted en mitad del acto social, ya sea de negocios o familiar. Rie por enésima vez el mismo chiste a su cuñado o da por buena la idea de su jefe de realizar un espectáculo de mimos albinos patinadores. Ha llegado su límite, usted aplica una presión sobre el botón en su nuca y ¡ZASCA!, al segundo siguiente vuela usted lejos del lugar, propulsado por los calcetines-tobera SOCIAL EJECTOR. Una leve maniobra lateral, un extender puños a lo superhéroe y aterriza usted sano y entero justo antes del comienzo del partidito. En casa o en el bar, eso lo decide usted, ¡es libre!.
SOCIAL EJECTOR no es peligroso, contamina un poco pero...¿quiénes son esos hippys ecologistas para impedire a usted salir volando a reacción por la ventana de casa?. Se suministra en elegantes colores, para que usted pueda combinar las carcasas con el color de su corbata o chalequillo. Es barato, moderno y su vecino ya tiene uno, ¿quiere que sea mejor que usted? ¿a qué espera para comprarlo?
Sólo deberá seguir dos consejos: procure activar su SOCIAL EJECTOR con vía libre por la parte de arriba. De lo contrario tardaría usted un buen rato en romper el techo con la cabeza, produciéndole una ligera migraña, retrasándole y arruinando el factor sorpresa. Recuerde también...espere, se lo pondré así como gritándole para que no se olvide ¡RECUERDE TAMBIÉN!, así, ya no podrán decir que no lo sabían...ehm...ah sí, recuerde instalar su interruptor en su nuca como lugar predeterminado. Si usted carece de la misma, puede optar por la espalda ( si se llega ) detrás de una oreja o bajo una axila. NUNCA instale el interruptor en sus partes pudendas, entrepiernas u otros sinónimos malsonantes. ¿No querrá usted trastearse los bajos en una reunión con sus suegros para escapar de ellos?. Si así lo hiciera no necesitaría este producto, el cabeza de familia lo pondría en fuga ayudado por la escopeta del abuelo. Vamos, servidor lo haría.
SOCIAL EJECTOR no es un producto Sótano 71. Fue un momento publicitario destinado a pagar un recibo de la luz de agosto del 1987.
4 comentarios:
Ilustre Mr. Incógnito:
Seguro que en sus sesudas sesiones pensantes ha ideado un modelo suegril. Si, ese que tiene en el almacén y no se atreve aún ponerlo a la venta. Démelo por favor.
Espero que el sistema eyector tenga la potencia suficiente para levitar a la suegra y lanzarla bien lejos.
Pénsandomelo mejor, póngame varios, por si algún intento fracasa.
Creemos que la intención del anunciante era la de escapar usted de esos momentos...sin embargo, con el uso con terceros, ha abierto usted un nicho de mercado impresionante.
Se merece usted que le regalen uno...pilas aparte.
Mister Ingenioso.
Dejo huella en su blog, para agradecerle la sonrisa frecuente, que desde que conozco su cuaderno me asalta casi a traición.
Su ingenio y calidad, me hacen un poco más feliz, incluso mejor persona.
Un abrazo de este que lo es, sin duda, su seguro servidor.
Queridisimo visitante:
Esta panda de irresponsables no tienen por costumbre soltar una lagrimita. Por ello hemos tenido que adquirir lágrimas artificiales en la farmacia de guardia.
Comenta el jefe de esto que son estos ratos los que hacen que merezca la pena doblar el lomo para juntar letras.
Dos saludos.
Publicar un comentario