Futbolista, no, cantamañanas televisivo, pues tampoco, ¿asalariado de la prensa rosa?, ni se le ocurra o le perseguiremos por la calle armados con periódicos enrollados. Para labrarse un futuro y tener un puesto de proyección haga carrera en el mundo del mal. Bajo su mando tendrá un ejército de soldados primorosamente engalanados con brillantes uniformes, mujeres fatales, esbirros pelotas...igualito que las empresas de toda la vida, pero enfocado a la dominación del mundo ( o pequeño país, los objetivos los elige usted ). Para ejercitar este puesto de responsabilidad vamos a darle una serie de pequeñas directivas que harán más eficiente su mandato. Apunte:
-Primero, su aspecto. Debe tener un detalle que lo distinga de sus pérfidos competidores: un parche en un ojo, un cabello llamativo...innove.Y cuide su vestuario, no vale dominar el mundo en bata.
-Encarge a un buen diseñador el logotipo de su organización. Ahorrar unos pocos euros en este aspecto puede hacer que sus enemigos no lo respeten o incluso, se carcajeen cada vez que aparezca en un vehículo, uniforme o tarjeta de visita.
-Cultive su carcajada maléfica. No hay malvado sin una carcajada en condiciones. Estruendosa, baja pero intimidatoria....cíñase a su apariencia. Una risita por una chiste que leyó en la puerta de un baño público,pronunciada en un mal momento, puede llevar al traste toda una operación.
-Siempre háblele a las ventanas, aunque su interlocutor esté a sus espaldas o en la puerta de la habitación. Da la imagen de malvado que necesita, y en caso de meter la pata su gesto no lo delatará.
-Si se ve obligado a jugar al poker con el bueno de turno es casi seguro que va a palmar usted un par de miles de euros. Sea elegante, compórtese como un buen perdedor, más adelante le dará su merecido a ese agente.
-Bajo ningún concepto cuente sus planes al héroe de turno. Se lo rogamos, ya han sido muchos los derrotados por emocionarse demasiado narrando sus planes de invasión de Prusia mientras el Bames Jond de turno se desataba, usaba el abrecartas del zapato o el rayo laser de las cejas.
-En caso de explosión de su costosa base ultrasecreta, huya. No se entretenga en parlamentos, chácharas o demás dialécticas. Ponga pies en polvorosa, levante un puño y jure su retorno vengativo.
-En caso de que opte por quedarse y emprenderla a puñetazos con el contrincante, cuidado con: elementos móviles, objetos candentes, adminículos con punta o afilados, fuego, electricidad, su propia piscina de hambrientos peces, bidones de extrañas y grumosas sustancias, precipicios, trampas, paneles de energía chisporroteantes, antenas de grandes dimensiones, cubos de fregona, pasarelas elevadas, etc. Por si las moscas no se acerque a nada más peligroso que una pinza de tender.
Hemos tratado los puntos básicos, hay otros aspectos más técnicos como cotización al régimen de malignos autónomos o convocatoria de huelga de esbirros que trataremos en otra ocasión. Que usted lo domine bien.
Informó Augusto Londrones, opositor a subordinado maléfico de nivel 3.
